El conjunto albinegro empata en casa ante el Melilla (1-1) y pierde la oportunidad de colocarse sexto, a cinco puntos del play-off
El Cartagena tenía la oportunidad de colocarse sexto y marcharse de vacaciones a cinco puntos del ascenso. El partido contra el Melilla, uno de los peores visitantes del grupo IV, era propicio para ello. El equipo de Víctor Fernández, sin embargo, dio un paso atrás, empató a uno y, lo que es más preocupante, volvió a parecerse al equipo de las primeras jornadas: lanzado al ataque y vulnerable en defensa, método que ya se creía haber superado por sus pobres resultados. Arriesga mucho y concede la suficiente como para dejarse puntos. Los de Currás, en cambio, aprovecharon la situación y se movieron como pez en el agua en este escenario. El encuentro dejó además una alegría: Cristo regresó al once, marcó el gol del empate y completó uno de sus mejores partidos con la elástica albinegra.